La alfombra roja de los Oscar 2025 donde la moda compitió con el cine

Ah, la alfombra roja de los Oscar, ese lugar donde las celebridades intentan convencernos de que no solo son buenas actuando, sino también vistiéndose. En la 96.ª edición, celebrada en el teatro Dolby de Los Ángeles (porque, claro, ¿dónde más?), las estrellas de Hollywood decidieron que el cine no era suficiente y que también querían ganar el premio a “Mejor Vestuario en la Vida Real”.

Ariana Grande, fiel a su personaje en *Wicked*, apareció con un vestido rosa palo que parecía haber sido diseñado por alguien que acababa de ver *La Bella y la Bestia* por décima vez. Zoe Saldaña, por su parte, eligió un diseño de Saint Laurent, porque, obviamente, cuando tu película es producida por una marca de lujo, no puedes llegar con un vestido de Zara.

Pero, ¿quiénes fueron las “mejor vestidas” de la noche? Demi Moore, la protagonista de *La Sustancia*, decidió que brillar literalmente era la mejor opción y apareció con un tono metálico que dejó ciegos a varios fotógrafos. Lupita Nyong’o, siempre impecable, llevó un vestido blanco de Chanel que gritaba “soy romántica, pero también carísima”. Halle Berry, por su parte, optó por un vestido “auténtico”, lo que sea que eso signifique en el mundo de la moda.

Y luego está Ariana Grande, cuyo vestido no solo impactó en la alfombra roja, sino que también promete ser recordado como uno de los más hermosos de la historia. Aunque, sinceramente, con esa falda voluminosa, también podría haber sido recordado como el más difícil de pasar por una puerta.

En resumen, la alfombra roja de los Oscar 2025 fue un desfile de moda donde las celebridades demostraron que, aunque no ganen un premio, siempre pueden ganar nuestra atención con un buen (o ridículo) look. Y si no, siempre queda la opción de brillar tanto que dejes ciego a medio Hollywood.