Julia Roberts recibe el César de Honor y nos recuerda que es una leyenda

Julia Roberts, la reina de las sonrisas, se lleva el César de Honor

Mientras el mundo espera con ansias los Premios Oscar, Francia decidió robar un poco de protagonismo con la 50ª edición de los Premios César. Y, oh sorpresa, la protagonista de la noche fue nada más y nada menos que Julia Roberts, la misma que nos enseñó que ser una prostituta con corazón de oro puede ser un negocio rentable en Pretty Woman. A sus 57 años, Julia recibió el César de Honor, un premio que básicamente dice: “Gracias por existir y hacer que el cine sea más bonito”.

Una ovación que duró más que un TikTok viral

Al subir al escenario del teatro Olympia de París, Julia fue recibida con una ovación de pie que duró lo que parece una eternidad en tiempo de redes sociales. La actriz, que siempre ha sabido cómo lucir un vestido, eligió un modelo negro con un hombro al aire y accesorios plateados. Porque, claro, si vas a recibir un premio en Francia, tienes que vestirte como si fueras a cenar con Coco Chanel.

Con esa sonrisa que podría derretir un iceberg, Julia agradeció al público y soltó una frase que nos hizo suspirar: “Tengo mucha suerte porque mi vida es un sueño”. Sí, Julia, todos lo sabemos, pero gracias por recordárnoslo mientras nosotros luchamos por pagar el alquiler.

De Pretty Woman a ícono mundial

En el comunicado oficial de la Académie des César, no se cortaron un pelo al elogiar a Julia. Destacaron que su presencia en el cine ha sido una fuente constante de inspiración y que es un verdadero ícono de la industria. Básicamente, dijeron lo que todos pensamos cada vez que vemos La boda de mi mejor amigo por enésima vez en Netflix.

Pero no todo es cine. Julia también es conocida por su filantropía, su compromiso con causas humanitarias y su activismo por el medio ambiente y los derechos de la mujer. O sea, no solo es una diosa en la pantalla, sino también en la vida real. ¿Cómo hace para tener tiempo para todo? ¿Tendrá un clon?

La alfombra roja y las polémicas de siempre

Antes de recibir su premio, Julia desfiló por la alfombra roja junto a Zoe Saldaña, de Emilia Pérez, y Karla Sofía Gascón, la protagonista de la película del director francés Jacques Audiard. Por cierto, esta fue la primera aparición pública de Gascón después de que unos tuits racistas salieran a la luz. Porque, claro, en Hollywood no hay noche de premios sin un poco de drama.

En resumen, Julia Roberts nos recordó por qué es una leyenda, Francia nos recordó por qué es el país del glamour, y nosotros nos quedamos aquí, soñando con el día en que alguien nos dé un premio por existir.