La temporada de vacaciones representa un reto para los trabajadores de la Cruz Roja Mexicana delegación Matamoros, quienes se enfrentan al incremento de las llamadas en falso por parte de jóvenes y niños que no tienen nada que hacer en sus hogares.
Ante esto, Francisco Gabriel Ponce Lara, coordinador del área de socorros de la dependencia en mención, aseguró que durante la época vacacional, se registra un incremento de hasta 15 por ciento en las llamadas de broma, lo que entorpece las acciones de esa dependencia.
Indicó que la regulación del 911 permitió la filtración de la información, pero aún así no se ha logrado acabar con las llamadas en falso, ya que los bromistas lograron evadir los métodos de seguridad de quienes están al frente del Centro de Control Cómputo y Comando (C-4), sitio de recepción de las llamadas de auxilio.
Dijo que en algunas ocasiones los elementos de la Cruz Roja salen a servicios que no ameritan su presencia, pero su obligación es atender todas las solicitudes de apoyo para evitar que algún ciudadano exponga su vida y no reciba ayuda de los cuerpos de rescate.
Ponce Lara, añadió que parte de la responsabilidad de que esto suceda es de los padres de familia, ya que dejan a los menores sin vigilancia o bien no les advierten la responsabilidad que implica jugar con los servicios de emergencia.
Ante esto, el coordinador del área de socorros de la Cruz Roja Mexicana aseguró que han tenido que tomar la tarea en sus manos y acudir por sí mismos a las escuelas para exhortar y concientizar a los niños de la importancia de no usar en vano el número 911.
Mencionó que parte del trabajo que se hace en las clases que imparte el área de Cruz Roja Niños, consiste en fomentar la cultura del respeto y cuidado del entorno, dentro del que destaca el apoyo y cuidado al prójimo protegiendo su vida al no entorpecer la labor de los rescatistas con llamadas falsas.