Brian Campbell gana el México Open en un desempate épico

Bienvenidos al drama del México Open, donde el golf se convirtió en una telenovela con más giros que un episodio de La Casa de las Flores. Todo parecía que el sudafricano Aldrich Potgieter iba a llevarse el trofeo sin sudar (bueno, tal vez un poco), pero el universo del golf tenía otros planes, y esos planes incluían al estadounidense Brian Campbell levantando el título como si fuera el último aguacate en el supermercado.

El torneo fue una montaña rusa emocional, con el alemán Stephan Jaeger, el inglés Aaron Rai, Potgieter y Campbell tomándose turnos para liderar como si estuvieran en un juego de sillas musicales. Al final, Potgieter y Campbell empataron con -20 golpes, lo que nos llevó a un desempate digno de un capítulo de Game of Thrones (pero con menos sangre y más palos de golf).

Después de dos banderas de desempate en el hoyo 18, Campbell hizo un putt que dejó a todos boquiabiertos, mientras Potgieter miraba desde la distancia como si acabara de perder el último Uber del día. Así, Campbell levantó su primer trofeo en el PGA Tour, y el México Open escribió un nuevo capítulo en su historia, porque, claro, ¿por qué hacer las cosas simples cuando puedes hacerlas dramáticas?

En tercer lugar quedó el estadounidense Isaiah Salinda con -19 golpes, demostrando que el podio no es solo para los protagonistas. Mientras tanto, el único mexicano en competencia, Santiago de la Fuente, terminó en el casillero 65 con -3 bajo par, empatado con otros dos jugadores. Al menos no fue el último, ¿verdad? Pequeñas victorias, amigos, pequeñas victorias.

Y así, el México Open nos recordó que en el golf, como en la vida, nunca sabes quién va a ganar hasta que alguien hace ese putt final. ¿Drama? Sí. ¿Emoción? Absolutamente. ¿Un final feliz para Campbell? Definitivamente. Hasta la próxima, golfistas.