Una increíble historia se ha vuelto viral en internet que pareciera sacada de una película de acción. Resulta que en Argentina se dio a conocer el robo de un féretro con el cadáver de un hombre, el cual fue sustraído del cementerio donde reposaban sus restos.
El curioso hecho tuvo lugar en el cementerio ubicado en la localidad situada a unos 57 kilómetros de Venado Tuerto, en Chovet, Santa Fe, Argentina. Fue el pasado 18 de enero cuando el hijo y la esposa del fallecido fueron al lugar a llevarle flores a su padre y marido, respectivamente, a su tumba y se dieron cuenta que la cripta había sido profanada.
Ahora, se ha destapado un conflicto familiar en medio de la desaparición y el hijo y esposa del fallecido han ofrecido una jugosa recompensa para quien les ayude a recuperar los restos del hombre.
En una entrevista otorgada por Silvio Marinovich y su madre Olga al medio La Capital, recordaron que fueron al cementerio y «las placas recordatorias no estaban y sentí que algo raro estaba pasando», detalló Silvio.
Al darse cuenta de lo ocurrido, narró que sufrió una crisis nerviosa por lo que: «terminé derribando la lápida de una patada y ahí nos dimos cuenta con mi madre que el cuerpo y el sarcófago no estaban ahí», relató el hombre sorprendido y decepcionado.
El insólito hecho fue reportado con las autoridades y en medio de las investigaciones se dieron a conocer una serie de acusaciones entre los hijos del hombre fallecido, pues Silvio culpó a su hermano de nombre Sergio, de la desaparición de los restos de su padre mientras que Sergio acusa a Silvio de lo mismo.
De acuerdo con información compartida por varios medios locales, la disputa familiar se podría estar originando por una herencia tras la muerte del padre. Tras el insólito hecho, el hijo y la viuda del hombre han ofrecido 5 millones de pesos argentinos, unos 99 mil pesos mexicanos, como recompensa a quien les ayude a recuperar el féretro con los restos de su familiar.
El hecho ya comenzó a generar diversas teorías entre los habitantes del pueblo de Chovet, pues como reporta el medio Perfil, algunos de los pobladores creen que el ataúd fue robado para saquear joyas y oro que había en su interior; otros dicen que tenía dinero y documentos de varias propiedades; mientras que otros rumores apuntan que el objetivo del robo del féretro y el cuerpo fue para realizarle una prueba de ADN al fallecido.
Fuente: Milenio
