Isaías nuevamente perdió fuerza y pasó de huracán a tormenta tropical después de tocar tierra cerca de Ocean Isle Beach, en Carolina del Norte, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC por sus siglas en inglés).
El sistema frontal azotó a la costa pasadas las 23:00 horas con vientos máximos sostenidos de 136 kilómetros por hora. En el último reporte tenía vientos máximos sostenidos de 117 kilómetros por hora.
“Ahora que el vórtice se ha movido tierra adentro, hacia el este de Carolina del Norte, los vientos se están calmando por lo que se ha reducido de nuevo a una tormenta tropical», dijo Robbie Berg especialista del Centro Nacional de Huracanes. La amenaza de tornados empezaba a ampliarse al sureste de Virginia, apuntó el servicio meteorológico en su previsión de las 004:00 horas.
Los fuertes vientos y lluvias ocasionaron inundaciones e incendios en cinco inmuebles en Ocean Isle Beach, dijo Debbie Smith, alcaldesa de la localidad, a la televisora WECT-TV. Mientras que los bomberos luchaban contra las llamas con la ayuda de agentes del condado de Horry, en Carolina del Sur, explicó Tony Casey, vocero de ese departamento. Alrededor de 30 personas tuvieron que abandonar sus casas por un fuego en un complejo de departamentos en Surf City, ubicada a 128 kilómetros al norte de Ocean Isle Beach.
Aún no está claro si los incendios estaban relacionados con Isaías, aunque se sostuvo que no se reportaron heridos. Isaías continúa avanzando El especialista del NHC sostiene que Isaías podría seguir derribando árboles y causando cortes de luz en su avance hacia el norte, a lo largo de la costa del Atlántico medio y Nueva Inglaterra.
“No creemos que vaya a haber un gran debilitamiento, seguimos pensando que va a haber vientos muy fuertes y racheados que afectarán a gran parte del Atlántico medio y al noreste durante un día o dos», sostuvo, calificando que las lluvias generarán problemas.
La empresa Duke Energy informó que cientos de miles de casas se quedaron sin suministro eléctrico mientras las fuertes lluvias y vientos azotaban zonas como Wrightsville, Kure y Wilmington, en Carolina del Norte.
Las tiendas y restaurantes de las zonas costeras cerraron temprano, hubo algunas interrupciones en el servicio eléctrico de los hoteles de playa e incluso, los más intrépidos bañistas, dejaron la costa anoche a medida que el huracán Isaías se aproxima a las Carolinas.
Fuente: Milenio