Zelensky busca garantías de seguridad mientras Trump juega al ajedrez político

Ah, el mundo de la geopolítica, donde los líderes se saludan con sonrisas forzadas y las tensiones se resuelven con tweets pasivo-agresivos. En esta ocasión, nuestro querido Volodymyr Zelensky, el presidente de Ucrania que parece sacado de una serie de Netflix, está listo para firmar un acuerdo de minerales con Estados Unidos. ¿Por qué? Porque, según él, el apoyo del ex-presidente Donald Trump es crucial en la guerra contra Rusia. Aunque, claro, no sin antes pedir unas cuantas garantías de seguridad para su país. Porque, ¿quién quiere firmar algo sin un seguro de vida, verdad?

Después de una discusión en la Casa Blanca que probablemente fue más incómoda que una cena familiar con tu tío político, Zelensky admitió que continuar el conflicto sin el respaldo estadounidense sería como jugar al Call of Duty sin munición. Dificilísimo. Pero no se rinde, porque, según él, es fundamental evitar que Vladimir Putin siga con sus fantasías de ocupación en territorio ucraniano. Spoiler: a nadie le gusta un vecino invasor.

“Estamos dispuestos a firmar el acuerdo sobre los minerales, que será el primer paso hacia las garantías de seguridad, pero no es suficiente y necesitamos algo más”, dijo Zelensky, mientras probablemente se preguntaba si Trump estaba más interesado en construir un muro que en ayudarle. “Un alto el fuego sin garantías de seguridad es peligroso para Ucrania. Llevamos tres años luchando y el pueblo ucraniano necesita saber que Estados Unidos está de nuestro lado”. Vamos, un poco de apoyo moral, al menos.

Y aquí viene la parte incómoda: “No puedo cambiar la postura de Ucrania respecto de Rusia. Los rusos nos están matando. Rusia es el enemigo y esa es la realidad a la que nos enfrentamos”. Palabras fuertes, pero necesarias, como cuando le dices a tu jefe que no vas a trabajar el fin de semana. Ucrania quiere la paz, pero no cualquier paz, sino una que sea justa y duradera. Y para eso, según Zelensky, es necesario ser fuertes en la mesa de negociaciones. Básicamente, no firmar nada sin leer la letra pequeña.

“Queremos la paz. Por eso vine a Estados Unidos y visité al Presidente Trump”, continuó Zelensky, probablemente recordando lo incómodo que fue ese apretón de manos. “El acuerdo sobre los minerales es solo un primer paso hacia las garantías de seguridad y el acercamiento a la paz. Nuestra situación es difícil, pero no podemos simplemente dejar de luchar y no tener garantías de que Putin no regresará mañana”. Spoiler: a Putin le encantan las segundas partes.

Y aquí llega el remate: si Ucrania no logra ingresar a la OTAN, necesitará una alianza firme con Estados Unidos. “Será difícil sin el apoyo de Estados Unidos, pero no podemos perder nuestra voluntad, nuestra libertad ni a nuestro pueblo”, dijo Zelensky, mientras probablemente pensaba en lo complicado que es negociar con alguien cuyo lema es “America First”. “Si no podemos ser aceptados en la OTAN, necesitamos una estructura clara de garantías de seguridad por parte de nuestros aliados en Estados Unidos”. Vamos, un poco de ayuda, ¿no? Porque nadie quiere que Putin se convierta en el villano de una secuela.