Guadalajara, Jalisco.- Fiscalía General de Jalisco informó este lunes que los tres estudiantes de cine desaparecidos el 19 de marzo pasado fueron privados de la vida y disueltos en ácido por sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) al confundirlos con miembros de un grupo rival. En una rueda de prensa, en la que estuvieron presentes los principales mandos de la Fiscalía, se confirmó la muerte de los estudiantes del Centro de Artes Audiovisuales (CAAV), Javier Salomón Aceves, Marco Francisco Ávalos y Jesús Daniel Díaz, quienes, previamente a ser privados de la vida, fueron torturados.
De acuerdo con las investigaciones, los estudiantes realizaban grabaciones para una tarea escolar en un inmueble ubicado en el municipio de Tonalá, mismo que en 2015 fue asegurado por autoridades policiales a un presunto narcotraficante de nombre Diego Gabriel Mejía Oliden, quien actualmente se encuentra preso en el Reclusorio Metropolitano. En aquél entonces se detuvo a otros individuos y se aseguraron armas de fuego y drogas.
Los estudiantes, ajenos a esta situación, usaban la finca para sus tareas de video con autorización de Edna Judith “N”, tía de Javier Salomón Aceves, a quien los anteriores propietarios del inmueble pusieron como prestanombres y también como administradora de sus negocios de estéticas masculinas donde se ejercía la prostitución.
El 19 de marzo pasado, al terminar sus grabaciones por la noche, seis universitarios salieron de la casa a bordo de dos vehículos, uno de los cuales sufrió una descompostura en una avenida cercana al anillo periférico de Tonalá, en las inmediaciones de Coyula, ahí, un grupo de seis sujetos armados llegó para llevarse privadas de la libertad a las tres víctimas ya conocidas. Según la Fiscalía, el hombre detenido hace tres años en la casa de seguridad pertenecía al grupo criminal de un sujeto con el alias de “El Cholo”, ex miembro del CJNG que hoy forma parte de un grupo rival conocido como la “Nueva Plaza”.
La intención de llevarse a los estudiantes fue la de torturarlos para obtener información sobre “El Cholo”, que extraoficialmente está identificado con el nombre de Carlos Enrique Sánchez Martínez.
Esta información se logró saber tras la detención de Gerardo “N” y Omar “N”, presuntos autores materiales de los homicidios. La fiscalía informó que el CJNG empleó a ocho personas para levantar, torturar, privar de la vida y finalmente disolver en ácido en dos domicilios a los jóvenes.
En un inmueble localizado sobre la calle Lechuza, en Pinar de las Palomas, en Tonalá se encontraron armas de fuego, uniformes y conchas metálicas falsas de la Procuraduría General de la República.
En ese sitio habrían torturado a los estudiantes y se localizaron restos biológicos que correspondían a Jesús Daniel, según pruebas de ADN. En una casa localizada en la calle Amapola, en la misma colonia, se aseguraron bidones con productos químicos, en los que los universitarios fueron disueltos en ácido. También fueron aseguradas armas de fuego.
La Fiscalía General de Jalisco dejó en claro que ninguno de los estudiantes era miembro activo de alguna organización criminal y su muerte fue producto de un error por los antecedentes de la casa de seguridad que era vigilada por miembros del CJNG que mantiene una batalla en la zona metropolitana de Guadalajara en contra de “El Cholo”.
Los detenidos ya se encuentran en prisión y vinculados a proceso por el delito de secuestro agravado por un juez de control, quien dictó prisión preventiva de dos años y concedió un plazo de seis meses para el cierre de la investigación. Ya se dictaron órdenes de aprehensión contra otros participantes.
AGENCIAS