México y las mujeres: 56 años para alcanzar lo que otros países ya tienen

Ah, México, ese país donde todo parece avanzar a paso de tortuga con una pata rota. En la última década, la participación económica de las mujeres pasó de un glorioso 43% a un no tan glorioso 46%. Sí, un aumento del 3%. ¡Qué emoción! Aunque, claro, seguimos muy por debajo del promedio de la OCDE, que ronda el 67%. Pero, ¿quién necesita estar a la par con los demás cuando puedes quedarte rezagado y disfrutar del paisaje?

El IMCO, siempre tan optimista, advierte que, si no hacemos algo al respecto, a México le tomará 56 años alcanzar ese 67%. Sí, 56 años. Para entonces, quizás ya tengamos coches voladores, colonias en Marte y, quién sabe, tal vez hasta un sistema de transporte público que funcione. Pero, ¿mujeres participando en la economía? Eso sí que es ciencia ficción.

Ahora, si por algún milagro decidimos acelerar el paso, el PIB podría aumentar en 6.9 billones de pesos en la próxima década. Eso es como ganar la lotería, pero sin comprar el boleto. ¿Y cómo lo logramos? Fácil: incorporando a 18.6 millones de mujeres a la economía para 2035. Nada más. Nada menos. ¿Alguien tiene un plan? ¿Alguien? ¿Bueno?

Por supuesto, no todos los estados están en la misma situación. Chiapas y Tabasco tendrían que duplicar su población de mujeres económicamente activas, mientras que la Ciudad de México y Colima solo necesitan un aumento del 40%. ¿Qué tal si empezamos por ahí? Aunque, claro, ¿por qué hacerlo fácil cuando podemos complicarlo?

El IMCO también nos regala esta perla: “Las entidades con menor participación económica de mujeres son las que más se beneficiarían de incluirlas”. Vaya, qué revelación. Es como decir que si comes más, engordas menos. Pero bueno, al menos nos dan números: Chiapas podría ver su PIB aumentar hasta un 32%, mientras que Oaxaca, Hidalgo y Tlaxcala se conformarían con un 11%. No está mal, ¿no?

Y aquí viene la cereza del pastel: si aprovechamos el talento de las mujeres, podríamos reducir la informalidad y mejorar la productividad. ¡Imagínense! Un México donde las mujeres no solo trabajan, sino que lo hacen en condiciones dignas. Qué locura, ¿verdad? Pero, claro, entre 2014 y 2024, la participación económica de las mujeres en México creció más lento que el promedio de la OCDE. Así que, mientras el mundo avanza, nosotros nos quedamos mirando cómo se nos escapa el tren.

En resumen, la OCDE nos dice que, en promedio, el aumento de la participación económica de las mujeres impulsó un crecimiento anual del PIB per cápita de 0.37 puntos porcentuales entre 2000 y 2022. Los hombres, por su parte, contribuyeron con menos de la mitad. ¿Moraleja? Las mujeres son el motor que México necesita, pero parece que preferimos seguir empujando el coche cuesta arriba. ¿Alguien tiene un mapa?