Mujeres de la ANUEE exigen justicia energética y Sheinbaum las ignora

Mujeres de la ANUEE: luchando contra la CFE y el olvido gubernamental

Imagina esto: un grupo de mujeres, cansadas de que les corten la luz y les cobren tarifas que parecen sacadas de un capítulo de Black Mirror, deciden salir a las calles. No, no es el inicio de una película de superheroínas, es la realidad de las integrantes de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica (ANUEE). Este lunes 3 de marzo, marcharon desde el Ángel de la Independencia hasta Palacio Nacional para exigirle a la presidenta Claudia Sheinbaum que les dé una tarifa social justa, reconozca la energía eléctrica como un derecho humano y, de paso, renacionalice la industria eléctrica. ¿Demasiado pedir? Para ellas, no.

Sheinbaum, ¿dónde estás?

Las mujeres de la ANUEE no están para juegos. Tras años de ser ignoradas, decidieron que era hora de hacer ruido. Y no cualquier ruido, sino el que se escucha en pleno Día Internacional de la Mujer. María Teresa de Jesús Acosta López, coordinadora nacional de la ANUEE, dejó claro que no están dispuestas a quedarse calladas: “No llegamos todas, faltamos las mujeres de la ANUEE, ya que nos sentimos excluidas”. O sea, Sheinbaum, si tu política es de humanismo, ¿por qué no las incluyes?

La CFE: el villano de la película

Si la CFE fuera un personaje de ficción, sería ese villano que todos odian pero que sigue apareciendo en cada temporada. Cortes de energía, tarifas impagables, acoso telefónico y hasta el uso de la fuerza pública para cobrar deudas. Sí, la CFE parece más una empresa de terror que de servicio público. Acosta López lo resumió perfectamente: “No podemos decir que ellos están actuando con humanidad”. Spoiler: no lo están.

14 años de lucha y nada cambia

Desde hace 14 años, la ANUEE ha estado en la primera línea de batalla contra los abusos de la CFE. Altos costos en las tarifas, cortes arbitrarios, cobros extrajudiciales y hasta la imposición de medidores “modernizados” (léase: más caros). Y, por si fuera poco, la privatización del sector eléctrico sigue avanzando, a pesar de las promesas de reforma. ¿El resultado? Las usuarias y usuarios siguen siendo tratados como criminales por querer un servicio digno.

¿Y ahora qué?

Mientras las mujeres de la ANUEE siguen esperando una audiencia con Sheinbaum, el resto de nosotros nos preguntamos: ¿cuándo dejará la CFE de ser el villano de esta historia? Por ahora, las integrantes de la ANUEE seguirán luchando, porque, como bien dicen, “la energía eléctrica es un derecho humano, no un privilegio”. Y si alguien no está de acuerdo, que intente vivir sin luz un par de días. Spoiler: no es divertido.