Los compromisos que Andrés Manuel López Obrador hizo durante su gira de agradecimiento requieren 418 mil millones de pesos en 2019, entre éstos sus programas emblema: Jóvenes Construyendo el Futuro, duplicar pensión a adultos mayores y crear 100 universidades, publicó Milenio.
Si bien en campaña propuso apoyos sociales encaminados a aminorar la pobreza y elevar el crecimiento económico, en su último recorrido por 30 entidades que concluyó la semana pasada le puso costo a sus promesas y a sus 25 programas prioritarios.
De acuerdo con las fichas de inversión total preliminar que contempla el próximo gobierno federal, y de las que MILENIO tiene copia, López Obrador tiene que garantizar en el presupuesto de 2019 alrededor de 500 mil millones de pesos para poner en marcha los programas sociales prometidos en campaña.
Tabasco es el estado que más inversión recibirá el siguiente año, con 63 mil 975 millones de pesos, de los cuales 50 mil millones son para la construcción de una refinería en Dos Bocas, Paraíso, que forma parte del rescate del sector energético.
En cuanto al financiamiento de programas sociales, destinará más recursos al Estado de México, 46 mil 357 millones de pesos, por registrar los mayores niveles de marginación del país. Mientras que Colima es el que, por el momento, recibirá la menor inversión, 2 mil 41 millones de pesos.
El equipo de transición se ha enfocado en afinar el plan para implementar los 25 programas prioritarios del próximo gobierno federal, que van desde Jóvenes Construyendo el Futuro, con el que ofrecerán trabajo y becas a los llamados ninis, entregarán apoyos a estudiantes de todos los niveles y se crearán 100 universidades públicas.
También contemplan el aumento a la pensión para adultos mayores, otras para personas con discapacidad, la plantación de un millón de árboles frutales y maderables y garantizar el servicio de internet en el país.
Además, se propone crear una zona franca en la frontera norte del país, rescatar el sector energético con la modernización de las seis refinerías, la construcción de una en Tabasco, el plan de extracción de gas y petróleo y de producción de más energía eléctrica, y la rehabilitación de las plantas de fertilizantes.
A estos proyectos se suman el desarrollo del Istmo de Tehuantepec y la construcción del Tren Maya, la obra de infraestructura más importante del siguiente sexenio.
Fuente: Zócalo